La realidad cultural de los grupos sociales en el Perú es muy diversa, por eso se aprecian muchas manifestaciones socioculturales de pueblos escondidos en el tiempo y el espacio que persisten en sus tradiciones con nuevas propuestas pero con la afirmación de sus creencias y costumbres. Esto, con la finalidad de hacer conocer su territorio, sus formas de vida, velando además por su subsistencia a través de la danza y otras bondades que le da la naturaleza.
La realidad cultural de los grupos sociales en el Perú es muy diversa, por eso se aprecian muchas manifestaciones socioculturales de pueblos escondidos en el tiempo y el espacio que persisten en sus tradiciones con nuevas propuestas pero con la afirmación de sus creencias y costumbres. Esto, con la finalidad de hacer conocer su territorio, sus formas de vida, velando además por su subsistencia a través de la danza y otras bondades que le da la naturaleza.
Las danzas tradicionales constituyen la riqueza y vigencia actual de estas manifestaciones demostradas en cada una de sus fiestas que si bien en el Perú profundo aún tienen valor místico, en otras pasaron a tener una connotación distinta, siendo éstas renovadas en el tiempo. Bondades que queremos destacar y promover a partir de estas líneas.
La danza por naturaleza es integral, biopsicosocial y un medio posible en la educación, en la salud, en el bienestar emocional, físico y en otras actividades inherentes al ser humano, actividades que se practican cotidianamente en el departamento de Puno. Sin duda, cada mes hay siempre un motivo para danzar.
Puno, a orillas del lago Titicaca donde el cultivo de la danza es parte de la manifestación de todos los pueblos pueblos quechuas, aymaras y mestizos, es el lenguaje no verbal que a través de los movimientos le rinden culto a la naturaleza en la representación de la vida y la convivencia con ella misma. Danza Tradicional Salud Energía.El respeto por la cultura, la naturaleza, las costumbres, tradiciones y los valores morales, constituye mirar el movimiento hecho danza de manera holística no solo por su presentación social, geográfica, etnográfica, sino también la danza como alternativa de bienestar, salud mental, corporal y espiritual.
¿Por qué la Danza Vital? Porque la danza es movimiento y el movimiento es vida como el respirar y exhalar, como los latidos del corazón. La danza tradicional es el reflejo de la vida, constituye una actividad que fortalece la filosofía de reciprocidad andina, promueve el desarrollo de las relaciones interpersonales y de la inteligencia emocional; es decir, busca equilibrar las condiciones físicas o espirituales de los individuos y/o grupos de personas, porque la danza es el instrumento no es el fin, es un estilo de vida.
Los pueblos andinos quechuas y aymaras han tenido como principio de vida el reconocimiento a la naturaleza expresado en sus actividades sociales, religiosas, y comunales. El sentido de reciprocidad y el respeto entre todos y la naturaleza, constituye una concepción y espiritualidad de los principios de la vida reflejada en su filosofía; es decir, se sustenta en un pensamiento cíclico e integrado.
Son muchos los autores que hablan sobre este tema como Polar O. (2000) que dice: “Entonces, el hombre es considerado una unidad como su medio ambiente, porque su actitud con la naturaleza es de comunidad con ella y no de sojuzgamiento; su trabajo agrícola y ganadera es siempre motivo de fiesta y alegría” Para tomar como ejemplo lo mencionado líneas arriba, de toda la diversidad de danzas que se encuentra en el departamento de Puno, nos situaremos en una de las más representativas y costumbristas de las zonas indígenas: pujllay, anata o carnaval. El pujllay en quechua y anata en aymara, es una fiesta ancestral que data de la época prehispánica, es una manifestación que guarda relación entre la persona, la naturaleza y la divinidad, siendo un ritual de renovación de la creación del mundo y de la naturaleza, en esta fecha se restablecen las relaciones sociales entre niños, jóvenes y adultos. La danza simbólicamente representa la alegría y el bienestar de toda una comunidad.Las danzas de Carnaval constituyen aquellas que están relacionadas en algunos casos con la agricultura y en otros, con la ganadería dependiendo del piso geográfico donde se ubica el grupo social étnico. Cuando indagamos sobre el tema nos encontramos con diversos investigadores que hablan sobre el tema como Paniagua F.(1990) que dice: “Es muy conocido el caso de las danzas carnavalescas que se producen en forma tradicional y que también comprenden mitos y leyendas… Generalmente obedecen a las espontáneas manifestaciones de alegría y regocijo en homenaje a la chacra en flor, como tributo a la fecundidad de la generosa tierra”.
La danza tradicional por ser un lenguaje del movimiento constituye el medio más efectivo de expresión, es una herramienta de comunicación utilizada por los pueblos para dar a conocer su actividad económica, su filosofía, sus costumbres; siempre en una dualidad con la actividad y la naturaleza, el respeto por el medio ambiente y la solidaridad.
¿Cómo ayuda la práctica de la danza tradicional al bienestar y la salud? desde mucho tiempo atrás la danza es un medio terapéutico, ya que busca el equilibrio emocional que promueve la actividad física, genera además alegría y combate los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares y estrés. La acción danzaria involucra varias actividades y disciplinas que se interrelacionan entre sí, como el arte, la psicología, la salud, la educación, los valores, la sociedad, las creencias y su correspondencia con el pensamiento cósmico, por ello es vital practicarla, nos provee de muchos beneficios.
Esto nos demuestra que existe una interrelación entre los aspectos involucrados en esta propuesta “DANZA VITAL”, tenemos que ver la danza más allá de la representación, en los beneficios que ella nos da y que debemos sistematizar.
ConclusionesLa danza puede ser un instrumento de formación de bienestar y salud, ayuda al ser humano a combatir el estrés y otras dolencias, puesto que su práctica es integral; es decir, biopsicosocial.Si se sistematiza la Danza tradicional y se promueve sus beneficios, se puede constituir un espacio que genere ingreso económico para la zona a partir de sus propias costumbres, y también un instrumento para fortalecer su autoestima e identidad.Debemos regresar a nuestros inicios, donde el hombre vivía de manera natural y la danza es una herramienta para ese proceso, porque facilita esa toma de conciencia personal.
Fuente: Revista Brisas